De la redacción
Además de los daños que las políticas de la administración Trump asesta todos los días a la sociedad, un nuevo ataque que se dirige al principio fundamental de la democracia, el derecho a la libertad de expresión consagrado en la Primera Enmienda constitucional se encuentra en peligro.
Entre otras cosas, la Primera Enmienda prohíbe al Congreso restringir la libertad de prensa o el derecho de las personas a hablar y opinar libremente. Y este derecho puede ser restringido, e incluso anulado de diferentes maneras, no sólo amordazando o callando las voces de las personas, sino falseando la realidad; lo que es quizás la forma más efectiva de hacerlo porque en general pasa desapercibida.
Algo que pude servirnos de ejemplo para ilustrar esta historia, por su apremiante actualidad es la horrible política del gobierno de Trump, de arrancar a los niños de los brazos de sus familias en la frontera.
Como se sabe, muchos medios de comunicación han estado desafiando los puntos de discusión de la Casa Blanca, para exponer la falsedad que propaga sobre esta terrible historia. Pero precisamente la inminente amenaza a nuestros derechos de la Primera Enmienda podría hacer imposible su defensa.
La Unión Estadunidense de Libertades Civiles (Aclu), nos advierte aquí sobre dicha amenaza a la libertad de expresión. En un comunicado sostiene que la poderosa corporación de las telecomunicaciones electrónicas, “Sinclair Broadcasting Group, obligó a sus estaciones locales de televisión a emitir segmentos que culpan a los ‘liberales’ por exagerar la crisis de la separación familiar en la frontera”.
Ahora, Sinclair ha propuesto una fusión con Tribune Media, “que crearía un conglomerado de transmisión con un poder sin precedentes, controlando 200 estaciones de televisión en todo el país”.
Habrá de saberse que en el famoso caso contra la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) , ‘Red Lion Broadcasting Co. v. FCC’, la Suprema Corte de Justicia –hoy también bajo el peligro de perder su balance-, dijo en un fallo de 1969 que “Un medio diverso es esencial para mantenerse informado “.
Por eso, al limitar las opiniones que pueden expresar los presentadores locales, en la referida fusión que busca Sinclaire con el Tribune, “Sinclair puede plantear serias amenazas para el futuro de nuestra democracia”, dice la Aclu.
Una lección aprendida con amargura durante esta joven administración federal es que lo que en aquella oportunidad escribió la FCC: “Si quieres hacer creer a la gente una mentira, los expertos nos lo enseñaron, hazla grande… Y si quieres que la gente se quede quieta ante una atrocidad, haz que la mentira sea lo suficientemente grande como para no tener personalidad, ni rostro humano individual».
La intensión de esta administración, como se ha visto, es la de «deshumanizar» inmigrantes y «decir mentiras acerca de cuántas personas cruzan la frontera ilegalmente, cuántos de ellos son pandilleros y traficantes de drogas y violadores», para hacer que los estadunidenses ignoren en realidad la verdadera situación.
Como ha dejado claro en el año y medio que lleva esta administración Trump, “una y otra vez se pronuncia en contra de la libertad de prensa, a menos que sea una prensa a su favor”. De hecho, cita la Aclu, el presidente Trump una vez tuiteó: «Sinclair es muy superior a CNN e incluso es más que la falsa NBC, que es una broma total».
Hoy como nunca ha sido más crítico salvaguardar los medios sociales de comunicación. En las próximas 24 horas se corre el inminente peligro de perder la relativa libertad de expresión”, ya que a estas horas mañana la FCC leerá y considerará los comentarios públicos mientras contempla la fusión propuesta. “¿Adivine de qué lado está la FCC con esta inminente fusión?”, se pregunta retóricamente la Aclu.
La FCC se preocupa imprudentemente por impulsar un acuerdo de fusión que convertiría a Sinclair en “el mayor conglomerado de transmisión de televisión que este país haya visto”, dice el comunicado. “No podemos permitir que esta corporación nos quite nuestros derechos a la libertad de prensa y a la libertad de expresión…. No tenemos un segundo de sobra que perder”.
Y aquí está lo que Aclu propone como primera estrategia para detener dicho trato:
- Exigir a la FCC que detenga esta fusión y difundir la palabra en las redes sociales. Se necesita reunir la mayor cantidad de vapor (fuerza) posible, hasta que cierre el período de comentarios este jueves 12 de julio DE 20Q18, en cuyo momento…
- La FCC leerá y considerará nuestros comentarios mientras contemplan la fusión propuesta.
- La FCC tiene hasta el 8 de agosto para tomar una decisión, de lo contrario la propuesta de acuerdo expirará, salvándonos a todos de esta peligrosa amenaza a nuestras libertades constitucionales■