Los republicanos han nominado oficialmente a Donald Trump como su candidato presidencial. La Convención Nacional Republicana en Cleveland, Ohio, estuvo marcada por divisiones internas, escasa asistencia, pobre diversidad racial y acusaciones de plagio. En las calles de la ciudad, cientos de manifestantes protagonizaron diariamente protestas pacíficas contra Trump, su política migratoria y la brutalidad policiaca. José López Zamorano reporta desde la sede de la Convención.
Se escuchan gritos en el piso de la Convención… Y luego el momento en que Donald Trump acepta la candidatura oficial…
Al cabo de cuatro días de trabajos la Convención Nacional Republicana llegó a su clímax con la coronación de Donald Trump como candidato presidencial.
Aunque la Convención buscó ser escenario de unidad partidista, la cita conservadora dejó al descubierto las fracturas al interior del Partido Republicano, entre quienes apoyan sinceramente a Trump, aquellos que lo rechazan abiertamente y los que están resignados a votar por él para derrotar a Hillary Clinton.
Más de 700 de los 2 mil 467 delegados votaron por otros candidatos. Miembros del movimiento “Nunca Trump” intentaron sin éxito ofrecer un candidato alternativo… y algunos delegados latinos externaron opiniones encontradas en torno a la candidatura del millonario estadunidense, en especial en el tema migratorio.
Adryana Boyne es una delegada de Texas:
“Yo voy a votar por él y por Mike Pence, pero me encantaría que hubiera una disculpa de su parte para limar asperezas, eso sería un acto de valentía muy fuerte de su parte”
Artemio Muñiz, un delegado alterno de Texas, es uno de los republicanos opuestos a Trump:
“No, no lo apoyo, por tanto que ha dicho de los mexicanos, ha dicho que somos violadores, criminales. Mis padre eran inmigrantes indocumentados y recibieron la amnistía migratoria en 1986 con el presidente Ronald Reagan y desde entonces el Partido se ha alejado de esa herencia”, dijo.
Algunos delegados latinos sí apoyarán a Trump al margen de la polémica migratoria, por considerar que es la carta más fuerte para las elecciones del 8 de noviembre. Tal es el caso de Natalie Reyes, que representa a El Paso, Texas.
“Es la mejor opción que tenemos contra Hillary Clinton, y además de eso Trump tiene mucha experiencia como líder y creo que sería muy buen presidente”
Las divisiones en el seno del Partido Republicanos fueron más obvias cuando el senador de Texas, Ted Cruz evitó respaldar de manera expresa la candidatura de Trump durante su discurso en el tercer día de sesiones. Para apagar la polémica, el legislador texano dio una explicación ante miembros de la delegación de su estado que le reclamaron haber roto la promesa de apoyar al candidato ganador:
“No estoy acostumbrado apoyar a la gente que ataca a mi esposa y ataca a mi padre”, respondió Cruz.
Ralph Alvarado, senador estatal de Ohio y uno de un puñado de latinos que aparecieron en la lista de oradores de la Convención, dejó en claro su rechazo a la estrategia de Cruz.
“Para mí es un error, la pelea ya está hecha, ya la primaria está terminada, todo se terminó, estamos yendo para adelante, ahora como una sola persona tenemos que derrotar a la señora Clinton y elegir un republicano”, señaló Alvarado.
Desde un día antes de la Convención Nacional Republicana las calles de Cleveland fueron escenario de manifestaciones diarias, la mayoría pacíficas, aunque menos numerosas de lo anticipado originalmente por la policía. La primera estuvo dedicada principalmente a denunciar las políticas migratorias de Trump hacia los mexicanos y musulmanes.
“Se escucha el cántico “De Palestina a México, estos muros tienen que caer”
Una de las manifestaciones más llamativas fue realizada en la Plaza Pública de Cleveland por la organización de inmigrantes indocumentados, “Mijente”, luego que la Plataforma Política de los Republicanos apoyó edificar el muro en la frontera con México y recomendar el fin de las acciones ejecutivas migratorias del presidente Obama.
Con vestidos de manta, decenas de manifestantes formaron un muro humano “de amor” alrededor de la Convención Nacional Republicana, en rechazo al “muro de odio” de Donald Trump.
Se escucha la colectiva:
“El muro que quiere construir para separarnos, nunca será más fuerte que el muro de nuestro amor”
Aunque Rubén Herrera es un ciudadano estadunidense de origen mexicano, decidió ser un participante de la protesta.
“Estamos aquí para decirle a Trump, a los republicanos y a todo el país que no nos vamos a ir, aquí estamos, somos seres humanos, merecemos derechos humanos y vamos a pelear hasta la victoria”
Al margen de las controversias, se espera que la Convención Nacional Republicana resulte en un aumento inmediato de los bonos de Trump en las encuestas nacionales, pero a partir de la próxima semana la atención nacional se dirigirá a la cita de Hillary Clinton y los demócratas en Filadelfia.
