Marco Vinicio González
Dando marcha atrás a su oposición de apenas hace un par de semanas a la agenda del presidente Biden, este miércoles por la noche el senador demócrata de Virginia Occidental, Joe Manchin acordó incluir un multimillonario presupuesto federal para programas climáticos y energéticos, y el aumento de impuestos para solventar un paquete que subsidiaría la atención médica y reduciría el costo de los medicamentos recetados.
Con esto, se abre paso la acción climática más ambiciosa jamás tomada por el Congreso, pues dicho paquete reservaría 369 mil millones de dólares para propuestas climáticas y energéticas, y recaudaría aproximadamente 451 mil millones en nuevos ingresos fiscales durante una década, además que recorta el costo de los medicamentos recetados en 288 mil millones de dólares.
Este paso gigantesco fue anunciado la noche del miércoles por el líder demócrata del Senado, Charles Schumer, de Nueva York, y por el propio Manchin. El referido acuerdo reduciría el déficit federal en alrededor de 300 mil millones de dólares y buscaría reducir el costo de la atención médica, así como del consumo doméstico e industrial de la electricidad.
Pero no todos están contentos con el acuerdo anunciado por los senadores Shumer y Manchin. Como era de suponer, grupos de cabildeo de grandes corporaciones se opusieron rápidamente a este acuerdo, concentrando sus baterías en el impuesto mínimo del 15 por ciento que impone el plan a las ganancias de las corporaciones, antes de declarar sus ingresos al fisco, para evitar las multimillonarias deducciones que tradicionalmente les han permitido las lagunas de la ley del ramo. Se espera que esos cabilderos hagan un esfuerzo de última hora para derrotar o debilitar el acuerdo Manchin-Schumer, que tomó por sorpresa a Wall Street, dice la television.
Expertos afirman que el acuerdo se halla todavía muy por debajo de las expectativas originales del presidente Biden, por lo que muchos demócratas temen que en las elecciones intermedias que se aproximan los votantes estén pensando en los altos costos de la vida, con la inflación en su nivel más alto en 40 años.
Pero dicen también que el referido acuerdo podría brindar a los demócratas un alivio en los próximos días para salvar una parte importante de su agenda nacional, que hasta hace muy poco parecía hundida. Y que esperan obtener rápidamente los votos que necesitan en el Senado, tan pronto como la próxima semana.
Conocedores en el tema señalan sin embargo que aún falta sortear algunos obstáculos entre los propios demócratas incluso, pues varios de ellos han expresado escepticismo sobre algunas de las medidas del paquete acordado. Y que tienen los ojos puestos en su correligionaria de Arizona, la senadora Kyrsten Sinema, una reconocida aliada de la comunidad empresarial que anteriormente respaldó un impuesto corporativo lo más mínimo posible para ellos•