‘Soñadores’ de Arizona. Foto: Cortesía de newlaborforum, cuny – edu

«Esta es una gran victoria para los Soñadores, en medio de meses de draconiana y desmedida política de aplicación de la –ley de- inmigración… La preservación de DACA es un tributo a la fuerza del movimiento del Soñador y un reconocimiento -por lo menos parcial- del Departamento de Seguridad Nacional, de que no debe dirigirse a inmigrantes indocumentados que tienen fuertes lazos con sus comunidades y han respetado la ley”.

De la redacción

Tras las más recientes críticas de miembros su propio partido, por incumplir sus promesas de campaña, en particular la de deportar a los inmigrantes indocumentados sin excepción, incluidos los llamados Dreamers o Soñadaroes, súbitamente el presidente Trump acaba de anuncar que oficialmente revierte su intensión de deportar a los inmigrantes indocumentados que llegaron a Estados Unidos cuando niños pequeños, y que fueron protegidos con una orden ejecutiva del presidente Obama (DACA), hace exactamente cinco años, reporta The New York Times hoy.

Sí, el Departamento de Seguridad Nacional (HS) anunció ayer por la noche que continuaría con DACA, el programa de la era Obama para proteger a esos inmigrantes de la deportación y proporcionarles permisos de trabajo a fin de que puedan encontrar empleo legalmente en este país, su país; porque la inmensa mayoría no conoce siquiera el país de origen de sus padres y muchos de ellos tampoco hablan –o no muy bien- el idioma materno.

El DHS dice en su sitio web que “los inmigrantes matriculados en el programa de 2012, conocido como Acción Diferida por llegar en la niñez –DACA-, seguirán siendo elegibles» para renovar cada dos años dicho estatus temporal; y observa que «ningún permiso de trabajo será terminado antes de su actual fechas de caducidad».

Enfurecidos ya desde las suspensiones temporales que diversas cortes federales han infringido a las órdenes ejecutivas de Trump para prohibir la entrada de musulmanes al país y otras medidas similares, criticaron fuertemente al presidente considerándolo por lo menos negligente, si no es que casi como un traidor.

No así activistas por los derechos de los inmigrantes, quienes saludaron la decisión. Porque han combatido ferozmente las directrices antinmigrantes de la Casa Blanca y el aumento de la aplicación de otras leyes de inmigración, así como el endurecimiento en la ejecución de la ley por parte de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), de la Patrulla Fronteriza y de otras agencias migratorias.

David Leopold, abogado de inmigración, dijo al Times: «Esta es una gran victoria para los Soñadores, en medio de meses de draconiana y desmedida política de aplicación de la –ley de- inmigración… La preservación de DACA es un tributo a la fuerza del movimiento del Soñador, y un reconocimiento -por lo menos parcial- del Departamento de Seguridad Nacional, de que no debe dirigirse a inmigrantes indocumentados que tienen fuertes lazos con sus comunidades y han respetado la ley”.

Tras un periodo de inacción del presidente Trump respecto a DACA y los ‘Dacamentados’, y luego de un vaivén de opiniones encontradas donde en una ocasión dijo por ejemplo que él no intentaría deportar a los Soñadores, y en otra, durante el verano pasado prometió «terminar inmediatamente» el programa DACA aduciendo que Obama había «desafiado la ley federal y la Constitución», hoy anuncia oficialmente que dejará en paz este importante programa que ha beneficiado a unos 800 mil jóvenes indocumentados (cifras del NYT), ahora con permiso temporal de trabajo, legado de su antecesor.

Porque una vez en el cargo, sostiene el Times, Trump enfrentó una nueva realidad: “los riesgos políticos de enviar a la deportación a un grupo de personas que son vistos con simpatía por muchos estadunidenses”.

Y es que en algunos casos, “los inmigrantes no sabían ni siquiera que estaban en el país ‘ilegalmente’. Muchos asistieron a escuelas estadunidenses desde el momento mismo en que estaban en el kínder”.

Sin embargo, y ahora si cumpliendo una de sus promesas clave de campaña, a través del titular de DHS, John Kelly, el presidente  Trump anunció ayer mismo la cancelación definitiva del programa de alivio migratorio para los inmigrantes adultos con hijos residentes o ciudadanos, DAPA. La revocación se produjo también en el quinto aniversario de DACA.

Este programa de DAPA buscaba mantener a los padres inmigrantes a salvo de la deportación y proporcionarles un permiso de trabajo renovable bueno por dos años; había sido anunciado por el presidente Obama en noviembre de 2014 pero nunca fue completamente lanzado porque junto con la segunda fase de DACA fueron bloqueados por un juez federal en Texas después de que 26 estados presentaron una demanda contra el gobierno federal y desafiaron la legalidad del esfuerzo.

Los republicanos calificaron dicho esfuerzo de amnistía encubierta, arguyendo que Obama rebasó su autoridad al proteger a una clase específica de inmigrantes que vivían ilegalmente en Estados Unidos, dijo por su parte la agencia de noticias Prensa Asociada■