De la redación
El 20 de enero Trump tuitió afirmando que el porcentaje del electorado latino a su favor subió del 19 al 50 por ciento. El Instituto Marista para la Opinión Pública /NPR / PBS Poll NewsHor dijo que se trataba de una anomalía, y advirtió que el manejo que hizo Trump de estos datos fue “una bravuconada característica”. Se trata, afirmó, de “un alto margen de error… acerca de ese subconjunto” de electores. Más bien fue un posible “exceso de muestreo por parte de los republicanos”, reporta la revista de análisis, Político.
El instituto Marista para la Opinión Pública sostienen que más vale que “los demócratas se preocupen de que los votantes hispanos puedan ayudar a reelegir a Trump y mantener al Senado bajo control republicano”.
Vale recordar que en el año 2020 será la primera elección en Estados Unidos donde los latinos conformarán la mayor minoría racial o étnica del electorado.
El Centro de Investigación Pew estima que en 2020 “32 millones de hispanos serán elegibles para votar, 2 millones más que los votantes negros elegibles”. Y representarán más del 13 por ciento del padrón general. En 2016 y 2018 los latinos alcanzaron el 11% de la votación nacional, sotiene Politico.
Latino Decisión realizó una encuesta justo antes de la elección presidencial de 2016, en la que encontró que Trump tenía el apoyo de sólo el 18% del voto latino. “Pero la cifra real fue del 28%, lo cual, dada la retórica incendiaria de Trump sobre los inmigrantes, provocó que algunos analistas y expertos se negaran a creer en las encuestas de salida hasta que otros estudios lo confirmaran”. Pero esos mismos números entre los latinos los alcanzó Mitt Romney en 2012, y “fueron suficiente para ayudar a Trump a conseguir una victoria en el Colegio Electoral”.
Un vistazo más de cerca a los números
Una nueva encuesta de POLITICO / Morning Consult señala que “la aprobación de los hispanos hacia Trump saltó bruscamente, a un 42%». Pero ese resultado, al igual que los números del Instituto Marista tiene un alto margen de error, dice. «Un promedio móvil más conservador sitúa la cifra en alrededor del 35%».
Otras encuestas de enero de 2019 sobre el voto latino para Trump
The Economist / YouGov: 32%. The Hill y HarrisX: 35%. Reuters / Ipsos: 36% (a mediados de enero, y la más alta desde las elecciones de 2016).
POLITICO / Morning Consult ubica este porcentaje en alrededor de 10 puntos porcentuales por encima de las encuestas de Reuters / Ipsos y Gallup durante todo 2019. Ya sea que sigan el ritmo o aumenten las tendencias, “estas encuestas sugieren que los hispanos están respondiendo a Trump como presidente, al igual que los estadunidenses en general; casi el 45% de los cuales aprueba a Trump, a diferencia de los afroestadunidenses, cuya aprobación a Trump se mantiene en torno al 10%”.
Pero Lee Miringoff, director del Instituto Marista para la Opinión Pública afirma sin embargo que dichas cifras no necesariamente se traducen en votos. A pesar de la tasa de aprobación del 50% que dice tener Trump entre los latinos, la encuesta marista encontró que “sólo el 27% de los hispanos dijo que definitivamente planean votar por Trump en 2020”; y que el 58% “definitivamente votará en su contra”. Aun así, un 27% es igual al porcentaje de votantes latinos que eligieron Trump en 2016 (28%); o a Mitt Romney sobre Barack Obama en 2012 (27%), o a los republicanos en ambas cámaras del Congreso en 2018 (29%).
Parece que hay espacio para el crecimiento
Vale recordar, dice Político, que “los encuestadores en 2016 pensaron que Trump obtendría sólo alrededor del 18% del voto hispano; él realmente consiguió el 28 por ciento». Si, por alguna razón, advierte, las encuestas siguen subestimando el atractivo de Trump entre los latinos, «podría estar en camino al 40% y hacia la reelección”.
Los latinos no son un bloque electoral monolítico
Según Pew, “dos tercios del electorado hispano son estadunidenses y tienen más probabilidades de aprobar a Trump que los inmigrantes naturalizados, que siguen siendo más demócratas que los votantes blancos no hispanos en parte porque muchos de ellos son adultos jóvenes y comparten muchas de las opiniones progresistas de su generación”.
Por su parte la publicación FiveThirtyEight sostiene que los latinos, que conforman aproximadamente el 12% de los demócratas, son menos liberales que los otros subgrupos de este partido.
Por ejemplo, “del 22 por ciento que se describe a sí mismo como moderados o conservadores… aproximadamente la mitad son católicos -otra cuarta parte son ex católicos-, y son conservadores respecto a cuestiones sociales, incluido el aborto”.
La esperanza de los demócratas de realizar una reforma migratoria o un acuerdo para proteger a los Dreamers, “ha aquedado atrás”, sostiene Político; y en la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, “preocupa más el cambio climático, la atención médica y el control de armas, similar a lo que sucedió la última vez que los demócratas tomaron el control de la Cámara, en 2009”.
Entre tanto los latinos disfrutan al igual que los estadunidenses de las tasas de desempleo en su nivel más bajo, y a pesar de la retórica antinmigrante de Trump, las cosas para la mayoría de ellos no han cambiado mucho, dice la fuente: “Las deportaciones están apenas un poco por debajo de los picos de la administración de Obama, mientras que los arrestos de inmigrantes son un poco más altos también”. Pero nada más.
El desafío para los demócratas en las elecciones del 2020 “parece más difícil que en 2016, cuando podría decirse que les costó la Casa Blanca”. El candidato demócrata “no puede simplemente asumir que los votantes hispanos acudirán a las urnas para evitar el segundo mandato de Trump”, concluye Político■