Así estaban todavía hasta hace poco tiempo viviendas en poblados de Puerto rico alejados de San Juan, la capital. Foto: www.wdf.com.

De la redacción

Casi tres meses después de que el destructivo paso del huracán María devastara a Puerto Rico, Caitlin Dickerson, reportera de The New York Times visitó un centro de prevención de suicidios en el corazón de la isla, donde detectó «signos de una grave crisis de salud mental», por un importante aumento de las llamadas telefónicas de puertorriqueños sumidos en la desesperación y la desesperanza, que intentan suicidarse por la falta de respuesta de las autoridades a su grave crisis de vivir durante casi tres meses sin energía eléctrica ni agua potable todavía en muchas partes de esa isla.

Y es que más de un millón y medio de estadunidenses que viven en Puerto Rico hacen fila para que el gobierno federal de Estados Unidos atienda efectivamente su tragedia, mientras intenta resolver las crisis en Texas y en La Florida, provocadas el año pasado por la fuerza destructiva de la naturaleza, que obedece tal vez al cambio climático y a la falta de prevención ante estos cada vez más comunes fenómenos.

El Times hizo circular este interesante documento en video, donde puede apreciarse que hasta los propios operadores de los teléfonos, que intervienen en dicho centro para prevenir el suicidio, viven también en esas más que precarias condiciones.

Además, es como si le hubiera venido a ‘llover sobre mojado’, porque la ‘Isla del Encanto’ se hallaba sumida ya en una crisis económica, con una deuda impagable y un desempleo galopante antes de la llegada de María. Los funcionarios de salud pública dicen que hay signos de una grave crisis de salud mental en la isla.

El Video: Inside a Suicide Intervention Center in Puerto Rico