Hoy compartimos con nuestra audiencia una historia de éxito, una hazaña lograda por estudiantes latinos, que se pusieron en la delantera respecto al resto de los otros estudiantes latinos de la nación, por su nivel de participación en cursos de colocación avanzada, conocidos como AP, que preparan al alumno para la universidad. ¿Qué ha hecho Nuevo México que no se hace en otras partes para poner a los estudiantes latinos en esa envidiable posición? En esta reseña de un programa reciente de Línea Abierta, expertas en la materia conversan con Samuel Orozco, Director de Noticias de Radio Bilingüe, sobre algunos factores que podrían ayudar a tener más éxito en la escuela; como crear mejores hábitos de estudio a temprana edad, y concienciar a estudiantes y padres sobre la importancia de estos cursos, entre otros de los temas de educación que son analizados aquí. Esta edición es un programa más de Diploma en Mano,una serie sobre educación y la crisis de deserción escolar, y de la iniciativa Let‘s Make it Happen!, realizada en partecon fondos de la Corporación para la Difusión Pública.
Sucede que los estudiantes latinos del estado de Nuevo México han ganado merecida fama al destacar como los que más participan en cursos y o obtiene mejores resultados en los exámenes de colocación avanzada (AP); o sea, las materias que preparan a los jóvenes de preparatoria (high school) para cursar la universidad.
Según datos del Departamento de Educación del año pasado, de todos los estudiantes latinos de Nuevo México casi la mitad, o un 47 por ciento cursó materias de colocación avanzada, y a un gran número de ellos no les fue mal. Más del 40% sacó 3 o más de calificación en el examen, lo cual los puso en el primer lugar de calificaciones entre todos los estudiantes latinos que tomaron estos cursos en todo el país.
Siguiendo los pasos de Nuevo México, en un segundo lugar estuvo Texas, donde 42.5% de sus estudiantes participaron en los cursos avanzados, y estuvo seguido por California, con poco mas del 38% de sus estudiantes dándose a la tarea de llevar estos estudios pre universitarios. En un distante cuarto lugar le sigue Arizona, con un 30%, plantea Samuel Orozco en la introducción que hace del referido programa deLínea Abierta que él mismo condujo.
¿Qué ha hecho Nuevo México que quizás no estén haciendo Texas, California y Arizona?, pregunta el director de noticias.
Lynne Rosen, Directora del Departamento de Lenguas y Equidad Cultural en las Escuelas Públicas de Albuquerque http://www.aps.edu/language-and-cultural-equity en Nuevo México, y una de las invitadas de Línea, seña hasta qué punto es Albuquerque parte de esta historia de éxito de Nuevo México, y apunta a una de sus principales causas:
“Yo diría que parte de nuestro éxito tiene que ver con nuestras familias. Nuestras familias latinas entienden que es importante que sus hijos puedan ir a la universidad. Que esto les va a ayudar. Y entienden el gran reto que sus hijos van a tener en estos cursos avanzados. Entonces esto se tiene que empezar desde el kindergarden”, asegura convencida Rosen.
Afirma que este sistema se debe afianzar desde la escuela primaria, y que las escuelas deben contar con un plan de cursos estudiantiles que resulte estimulante para el alumno latino. “Y tiene que tener un contenido que es diferente, donde tengamos razonamiento crítico para todos nuestros alumnos”.
Rosen señala que para sacar adelante esto “tenemos que trabajar con nuestros maestros…. Tienen que entender a nuestros estudiantes, que la cultura es importantísima. Que ellos sepan que la identidad latina es muy importante para nosotros, y también para nuestros padres y para nuestros alumnos… Que la lengua en español es importante, y que les va a ayudar en su educación, y en cuanto a participar en la universidad”.
Es preciso saber que estos cursos pre universitarios van a ayudar a sus hijos, insiste Rosen, “pero no van a tener que sacrificar sus raíces latinas ni su lengua materna” para obtenerlos. En el sistema escolar de Albuquerque, dice la Directora del Departamento de Lenguas y Equidad Cultural, “ofrecemos algunos de los cursos avanzados (AP) en español y en inglés”. Se imparten cursos como el de Historia de Estados Unidos AP en ambos idiomas, asegura. También ofrecen cursos (AP) de Historia Universal en inglés y en español. “Pero antes de hacer eso, nosotros ofrecemos muchos cursos a nuestros estudiantes, en español, que son de alto nivel… están tomando cursos más avanzados, como álgebra, geometría, química, cálculo en español. Entonces ellos tienen esas destrezas y tienen esos conocimientos en su lengua materna”.
En cuanto a que si Albuquerque corresponde o no con las cifras de alumnos avanzados del estado de Nuevo México en general, Rosen sostiene que sí:
“Me pare que sí. Nuestros alumnos latinos tienen que verse en el currículum, tiene que ver que ellos son capaces de tomar estos cursos avanzados, y que van a tener éxito. Además tiene que saber que las expectativas son muy altas, pero también tiene que saber que tenemos apoyos para que tengan éxito”. Como clases particulares y fondos para poder pagar por los exámenes avanzados cuando llegue la oportunidad de presentarlos después de tomar el curso, afirma Rosen. “Todo esto es muy importante. Y tiene que empezar con las familias y los padres y los estudiantes al nivel elemental, y continuar hasta el high school”. No es posible acometer esta tarea cuando el alumno está ya en la preparatoria, sino que tiene que comenzar desde el kinder, reitera enfática.
Las altas expectativas que deben alimentar los alumnos latinos tienen que estar basadas en una práctica, en una disciplina de todos y cada día, prosigue Rosen, y reitera que esto no es algo que se puede hacer solamente en high school.
Tenemos que trabajar con nuestros maestros para saber cuáles son las estrategias que ellos pueden usar en sus cursos para que nuestros alumnos entiendan el contenido académico, la práctica en cada contenido, a un alto nivel”.
Se sabe que el sistema escolar de Nuevo México incentiva a los maestros que imparten cursos AP (bajo una ley denominada de Iniciativa Hispana), con bonos otorgados por el buen desempeño y el ato rendimiento del estudiantado al maestro. En el distrito escolar de Albuquerque los maestros de todas las asignaturas, además de los cursos AP reciben bonos, adicionales a su salario por su buen desempeño, confirma Rosen, y enfatiza que esta política es parte de la referida ley. Además señala que “los maestros no tiene que recibir esos bonos, pero aquí, en las escuelas públicas de Albuquerque es sumamente importante para nosotros, y entonces ofrecemos los bonos a los maestros para que puedan enseñar -en todas las asignaturas- en inglés y en español”.
Aunque es de celebrar la gran hazaña de los estudiantes latinos de Nuevo México, por alcanzar el primer lugar en los cursos avanzados en la nación, Samuel Orozco pregunta a Lynne Rosen si este éxito no sera efímero, flor de un día.
“Le voy a decir que aquí, en el distrito de Albuquerque tenemos un enfoque enorme en la equidad. Eso sugiere que nuestros alumnos latinos tienen que tener una educación de alta calidad”. Esos es crítico, refuerza. “Y nosotros tenemos que dar más apoyo a nuestros alumnos para que tengan un mayor rendimiento, y que puedan entonces asistir a la universidad”. Retoma que esos cursos pre universitarios son importantísimos. “Pero también los otros cursos,que son a otros muy altos niveles; son tan importantes como los de AP. Porque son el cimiento, fomentan el desarrollo, dan el apoyo a los estudiantes, para que ellos vean que son capaces de tener éxito en clases que no son tan fáciles, que no son básicas sino que son avanzadas”.
Antes de concluir esta primera parte de la reseña Samuel Orozco quiere aclarar que el triunfo de los estudiantes de cursos avanzados de Nuevo México, en el ciclo 2013, lo obtiene sólo cuando se les compara con los demás estudiantes latinos del país; porque cuando se les compara con el resto del estudiantado general resultan por debajo del promedio nacional, en cuanto a los exámenes de AP.
“Lo único que yo agregaría”, dice Rosen, “es que con cada año que pasa nuestros alumnos latinos están mejorando y están avanzando. Tenemos más y más y más alumnos que están en estos cursos, y que están saliendo con buenas calificaciones para poder ir a la universidad. Para colocarse en materias a un nivel más alto en la universidad”, como muestra de que se han propuesto asumir este desafío, remontar el nivel imperante por debajo del promedio en la nación.
Por último, Lynne Rosen sostiene que la clave para fomentar de manera sostenida este hábito en la lectura, la escritura, el estudio y en general en la excelencia académica, tiene que ver con las reuniones y conversaciones que el distrito escolar mantiene constantemente con los padres de familia. “También tiene que ver con las conversaciones que nosotros tenemos con nuestros maestros, y el entrenamiento que les proveemos. La idea de que tenemos que empezar desde la escuela elemental es crítica. Y entonces esa idea de tener expectativas altas, con apoyo -institucional- para nuestros alumnos, es la manera como ellos se van a superar; es la forma como van a tener éxito. Y entonces, teniendo esas conversaciones con nuestro alumnos, con nuestros padres, con nuestros directores, es lo más importante. Eso es lo que da ánimo, lo que brinda la oportunidad para todos nuestros alumnos”. Así mismo, una de las claves se halla también en el apoyo que el sistema de educación pública de Nuevo México y Albuquerque brindan a los programas de educación bilingüe, para latinos, anglos y los habitantes que hablan el idioma Idaho. Esto, por la alta dificultad de los cursos avanzados o AP, y la necesidad de convencer a los estudiantes latinos de la importancia y los beneficios de este método de superación académica; los cursos y exámenes AP, el bilingüismo y la importancia de la cultura. “Porque a veces no hay muchos estudiantes latinos en estos cursos AP, y es necesario convencerlos de que deben y pueden tomarlos”.
Continúa…