El proyecto de legislativo que ampliaría la ley que permite a los niños indocumentados recibir atención médica bajo el programa de seguro público Medi-Cal, para incluir a jóvenes de hasta 26 años de edad, avanza en la legislatura de California. Dos importantes comités legislativos dieron su visto bueno, proponiendo que los gastos se cubran con el dinero que se recaude del reciente impuesto agregado al tabaco. El gran imponderable es el gobernador Brown, quien tiene que decidir en cuestión de días. Desde Los Ángeles, Rubén Tapia reporta.
Kevin es un guatemalteco de 20 años de edad que estudia administración de empresas en una Universidad de Los Ángeles. Padece de Eccema, una enfermedad de la piel que se manifiesta en unas pequeñas ampollas que salen en las manos y en otras partes del cuerpo.
“Es cuando se me abre más o menos la piel, y ya después de eso, como la piel ya está más o menos abierta, se infecta. Me empezaba a arder cuando estaba utilizando las manos o cuando escribía”, dice Kevin, quien por seguridad no da su apellido.
Hace 6 años Kevin, que vive en Los Ángeles con sus padres y dos hermanos, ha podido controlar la enfermedad con una crema que recibía gratis en una clínica comunitaria, porque era menor de edad. Cuando cumplió los 18 años, él la tuvo que comprar de su bolsillo.
“Intenté pagar la otra crema y esa fue la que me costó de 100 a 300 dólares, fue la primera que compre”
Cantidad que Kevin no puede pagar. Por suerte consigue más dotación gracias a un programa especial para gente pobre, pero no cubre visitas a un especialista.
“Sólo la primera visita vale de 60 a 100 dólares. Me imagino yo si tuviera que ir a más visitas, para ver cómo está funcionando el tratamiento, y si es efectivo o no…”
Kevin es uno de los más de 80 mil jóvenes que pudieran obtener atención médica gratuita hasta cumplir los 26 años si en los próximos días un comité conjunto del presupuesto, de la Asamblea y el Senado estatales, donde participa directamente el senador Ricardo Lara, se ponen de acuerdo y convencen al gobernador Jerry Brown, para que apoye los recursos, dice Mayra Álvarez, Presidenta de la organización, The Children Partnership.
“En total sabemos que son entre unos 80 o 90 millones de dólares. Ahorita los fondos son 54 millones en la Asamblea y en el Senado el resto del total. Ahorita lo que tiene que hacer ellos es negociar cuánto es el total y cuántos de joven adultos van a recibir esta cobertura”, señala Álvarez.
Proponen que el dinero se obtenga de los mil 200 millones de dólares que se calcula resultarán de la ley de impuesto al tabaco, aprobado el año pasado. Para presionar al gobernador, esta semana en varias ciudades de California grupos pro inmigrantes presionaron a Brown.
La próxima semana es la fecha límite para aprobar el presupuesto. Hay optimismo en la oficina del Senador Lara, y grupos como el de Mayra Álvarez también comparten este optimismo.
“Los jóvenes adultos son nuestro futuro. Son los trabajadores del mañana, las personas que van a inventar nuevas cosas, empezar diferentes negocios, eso es lo que importa: el futuro de nuestro estado. Y estamos dependiendo de los niños, en los jóvenes adultos que están aquí hoy”, afirmó Álvarez.
Sin embargo, las presiones por el proyectado déficit presupuestal que anuncio el gobernador Brown de mil 600 millones de dólares, la incertidumbre del Obamacare, aunado a numerosas demandas para que el dinero del impuesto al tabaco cubra otras prioridades, hacen que la extensión de la cobertura médica para los jóvenes migrantes hasta los 26 años de edad aun esté en el aire.
Para la Edición Semanaria de Noticiero Latino, desde Los Ángeles, California, Rubén Tapia.
Fotos: Rubén Tapia.