De la Redacción
Heather Lizárraga de la Clínica Romero inscribe a Ana Patricia, la hija de Natalio Hernández y su esposa Raquel Luján a Medi-Cal, ya que bajo la ley Salud para Todos que toma efecto el 1 de mayo, todos los niños indocumentados de California podrán tener acceso a cobertura completa bajo este programa de seguro estatal. Foto: Araceli Martínez.
El 95 por ciento de los 13 mil 900 niños que tendrán acceso ahora a una cobertura completa ya estaban inscritos al Medi-Cal de emergencia, lo que simplificó la transición al programa expandido, y gracias a esta expansión 17 mil 900 menores indocumentados se inscribieron a este nuevo programa por primera vez.
Casi 144 mil menores de edad que residen en California indocumentados, tienen acceso ahora a servicios completos de salud porque se han inscrito ya en el programa extendido de Medi-Cal, que es la versión estatal de Medicaid, el servicio de cuidados médicos para los pobres. Esto, de acuerdo con datos del Departamento de Servicios de Cuidado de Salud (DHCS) del estado, dice el periódico de Los Ángeles, La Opinión.
Los servicios completos del Medi-Cal incluyen cuidado preventivo y acceso a servicios médicos, dentales, de visión y de la salud mental, y comenzaron a estar disponibles para dichos menores sólo meses después de la entrada en vigor de la ley estatal que amplió el acceso al Medi-Cal, subsidiado por el gobierno de California.
Y es que estos niños y jóvenes hasta hace un par de meses (1 de mayo de 2016) tenían acceso sólo a las salas de emergencia o a muy limitados servicios de salud de manera gratuita o barata, bajo la ley federal que les daba acceso al Medi-Cal que todavía no había sido ampliado.
El 95 por ciento de los 13 mil 900 niños que tendrán acceso ahora a una cobertura completa ya estaban inscritos al Medi-Cal de emergencia, lo que simplificó la transición al programa expandido, y gracias a esta expansión 17 mil 900 menores indocumentados se inscribieron a este nuevo programa por primera vez. Antes, algunos de estos menores eran elegibles a programas locales que ofrecen servicios de salud que no se aprovechan de los fondos del Medi-Cal, sostiene la fuente.
Actualmente hay cinco estados que ofrecen cobertura auspiciada por el gobierno a menores sin documentos legales de residencia, California es el último en sumarse a esta lista, que comprende a Illinois, Massachusetts y Nueva York, así como al Distrito de Columbia. Pero el dinero federal no puede usarse para pagar por los servicios que brinda esta cobertura, asegura la fuente.
Y aún hay más. Para el año entrante se espera que otros 64 mil niños indocumentados soliciten el Medi-Cal extendido, dijo a La Opinión Tony Cava, un vocero del Departamento de Servicios de Cuidados de la Salud, DHCS.
Vale recordar que desde que entró en vigor la Ley de Cuidados de Salud Costeable (ACA), también conocida como Obamacare, alrededor de la mitad de los niños que residen en California, o cerca de 5.3 millones de estos menores gozan ahora de los servicios de cuidados médicos que brinda Medi-Cal, un programa de salud que no requiere de estatus migratorio para sus derechohabientes.
Sin embargo, bajo los lineamientos del Medi-Cal extendido, todos los beneficiarios deben cumplir con algunos requisitos. Por ejemplo, para una familia de tres personas, el ingreso familiar debe ser menor al 266% del ingreso que establece el nivel federal de pobreza, que es de unos 53 mil 600 dólares anuales.
Analistas de la Legislatura estatal de California estiman que expandir la elegibilidad para los menores indocumentados costaría al estado hasta 135 millones de dólares (las cifras varían).
La fundación California Endowment, que de acuerdo con la fuente ha apoyado los esfuerzos de expansión del cuidado de salud, a través de su campaña “Health4All”, manifestó a través de algunos funcionarios hallarse satisfecha con lo alcanzado hasta el momento.
El director de salud y servicios humanos del Endowment, Richard Figueroa dijo a La Opinión que “la inscripción en el Medi-Cal ha funcionado sin problemas, a excepción de algunas complicaciones técnicas en algunos condados”.
Esto se debe, dice el funcionario, al poco tiempo transcurrido desde que echó a andar la referida ley de salud. Muchas familias se hallan todavía en el proceso de selección de un plan de salud y de su médico de cabecera, dice el funcionario, por lo que podría ser demasiado pronto para detectar “problemas sistémicos”.
Los Ángeles cuenta con el mayor número de niños que son elegibles para el Medi-Cal extendido, bajo la nueva ley, entre todos los condados del estado, en donde se han tenido que procesar las solicitudes de ingreso, de manera manual, debido a problemas técnicos; lo que ha llevado más tiempo del previsto para completar las inscripciones, afirmó Figueroa.
Según la fuente existen algunos grupos defensores de los derechos civiles que trabajan con diferentes clínicas comunitarias y grupos de abogacía en los condados de Los Ángeles y Orange, para educar a las personas sobre la expansión del Medi-Cal. Uno de ellos es el Asian Americans Advancing Justice.
La Directora de Proyectos de esta organización no lucrativa, Doreena Wong dijo al periódico de Los Ángeles que muchas familias que ya cuentan con Medi-Cal de emergencia no se han enterado todavía que sus niños son elegibles para el programa extendido. Y que esto puede deberse al temor tradicional de dichas familias, a que la información de sus hijos indocumentados se reporte a las autoridades de Inmigración.
Y que “Debido a esta retórica antinmigrante que estamos viendo a nivel nacional, especialmente con la próxima elección, todavía es difícil convencer a algunas familias indocumentadas a presentarse”, lo que va a costar todavía mucho trabajo.
Es probable que dicha retórica, personificada en estos tiempos por la figura del candidato presidencial republicano, Donald Trump, incida de manera considerable en estos temores■
