De la redacción
Expertos políticos sostienen que el esfuerzo por anular el triunfo de Joe Biden como nuevo presidente de Estados Unidos no es un esfuerzo sincero, sino sólo para retrasar el proceso de certificación, con la intención de servir como un gesto simbólico para mostrar apoyo al presidente Trump. Biden, aseguran, de todos modos será certificado como ganador de la elección, pero enfrentará un retraso en el paso final del proceso de certificación. Al respecto, un veterano periodista de la fuente política en D.C., explica el conteo del Colegio Electoral e informa sobre la sesión conjunta del Congreso, en medio del asalto al Capitolio que ocurrió precisamente hoy y que pudo verse en la televisión.
Cuando se esperaba que fuera un día de celebración, porque el Congreso certificaba los votos que le dieron el triunfo a Joe Biden y Kamala Harris, en un proceso que tendría varias apelaciones de procedimiento pero que luego de ser rechazadas por cada cámara legislativa por separado turnarían al vicepresidente Mike Pence para que certifique que Biden es el nuevo Presidente. Un paso previo al día de la inauguración de la nueva administración.
Sin embargo, el país presenció en tiempo real por la televisión el primer asalto al Congreso desde los tiempos quizás de la guerra de independencia, hace siglos. La incursión violenta o el traspaso ilegal al recinto interrumpió por supuesto la referida certificación de Biden, y los legisladores, que no pudieron salir del Capitolio por las hordas embravecidas afuera, fueron puestos a buen recaudo por el equipo de seguridad del recinto oficial.
El asalto al Capitolio estaba siendo cometido por el propio pueblo estadunidense. O mejor dicho, por un sector social que fanáticamente sigue a ciegas a Trump, quien tras venirlos incitando a la violencia para rechazar el triunfo del presidente entrante, Joe Biden, los azuzó una vez más hoy, con un discurso donde les dijo a las hordas de sus seguidores entre otras cosas que los amaba mucho.
José López Zamorano, corresponsal de Radio Bilingüe en Washington, DC. Foto: www.aarp.org
Y justo en ese momento en que la horda de fanáticos asaltaba violentamente el Congreso en Washington, DC, Línea Abierta platicaba con José López Zamorano, veterano periodista que cubre la fuente política en DC, y que es colaborador de esta red de emisoras, quien desde su posición cercana a los hechos narraba en tiempo real los pormenores de los sucesos que ocurrían hoy durante el asalto al Capitolio.
“Afuera del Capitolio, convocados por su líder Donald Trump, cientos de sus seguidores se concentraron para, en un intento de hacer sentir su fuerza, protestar el triunfo de Joe Biden. Y luego de que Trump les calentó los ánimos en un discurso presencial, docenas se lanzaron contra las barricadas policiales para internarse al Capitolio, en medio de las advertencias de las autoridades locales contra un posible escalamiento de la violencia”, señaló Samuel Orozco, Director de Noticias de Radio Bilingüe, en la introducción de José Zamorano al programa de Línea Abierta.
“Lo que estamos viendo en este momento es que los manifestantes buscan entrar a la sala de sesiones del Congreso. Los agentes en este momento tienen sus armas desenfundadas. Realmente un asunto muy preocupante, Samuel…”, decía Zamorano emocionado.
Escuche:
Como escuchamos, tanto el vicepresidente en funciones, Mike Pence como el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, rompieron con el presidente. El primero, cuando Trump presionó a Pence para que desconociera y anulara la certificación de los votos que le dieron el triunfo a Joe Biden y Kamala Harris. Y el segundo, cuando McConnell declaró desde el pleno del Senado que “si se anulan los resultados, esto lanzaría a la democracia de Estados Unidos a una espiral de la muerte”. Y se opuso al designio de Trump, de desconocer el triunfo de Biden.
Podía verse a través de las imágenes de la televisión que “unos cuantos cientos de manifestantes prácticamente han tomado de rehén esta sesión del Congreso, en un intento seguramente por reventarla, por lo menos por hoy… para posponer, prolongar, mantener este drama político ante los ojos de la nación”, señaló Orozco.
El suceso era inverosimil, ver a hordas de personas con banderas del pais, confederadas y de Trump reclamando violentamente la falacia del fraude electoral, trepando por los muros del magno edificio y rompiendo ventanas, rebsando la copacidad de respuesta de la policia que defendia el recinto.
“Si nos remontamos a cuando las tropas británicas incendiaron el Capitolio… nunca habíamos visto algo así… un simpatizante de Trump con una pañoleta en la cabeza, sentado en la silla del Presidente del Senado. Un espectáculo triste y lamentable, de subversión del proceso político y la legalidad. En estos momentos lo único que sabemos, Samuel, es que los legisladores, tanto de la cámara baja como del Senado, están resguardados”, indicó Zamorano.
Escuche:
Trascendió que hubo arrestos de manifestantes desde ayer, y hoy, y que hubo dos heridos de bala, entre ellos una mujer que fue trasladada al hospital más cercano donde al parecer falleció.
La alcalde demócrata de Washington, D.C., Muriel Bowser decretó un toque de queda a partir de las 6 de la tarde, tiempo del Este. Solo personas autorizadas y trabajadores esenciales pueden estar en la calle después de las 6 o son arrestados por la policía, declaró a la prensa la alcalde Bowser.
