Marco Vinicio González
Radio Bilingüe
El Partido Republicano abrió hoy en la Cámara de Representantes una nueva confrontación con el presidente Obama. En una votación en gran medida simbólica, pues como se repitió ayer en Línea Abierta de Radio Bilingüe, el Presidente ha dejado claro que vetará la medida, los republicanos aprobaron hoy una iniciativa de ley para desarticular las acciones “unilaterales” del presidente Obama sobre inmigración, que está ligada al crucial financiamiento de casi 40 mil millones de dólares para el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) en el 2015.
“No tomamos esto a la ligera, pero simplemente no nos queda de otra”, dijo a la prensa el Vocero de esta cámara tras concluir la sesión legislativa de hoy, argumentando que las acciones del Presidente son inconstitucionales, y leyendo más de 20 citas textuales donde a partir de enero de 2008 Obama afirma que no actuaría sin el Congreso y que rechazaba el poder omnipotente de un Presidente.
En una votación final de 236 a favor contra 191 los legisladores acordaron hoy mantener sin embargo los fondos para DHS, pero incluyeron un conjunto de enmiendas destinadas a bloquear el financiamiento para la orden ejecutivas del presidente que busca diferir la deportación y dar alivio temporal a los padres de los ‘dacamentados’ (DAPA), o jóvenes que llegaron en la niñez y que se hallan protegidos por DACA. La referida medida permite permanecer legal y temporalmente en este país a unos 5 millones de inmigrantes indocumentados que ingresaron por lo menos hace 5 años, con hijos ciudadanos o con un estatus temporal de residencia legal.
Pero la cosa no paró ahí. Los republicanos también dejaron clara su intención de anular todos los movimientos del presidente Barack Obama para lo que resta de este nuevo Congreso, es decir, el tiempo restante de su presidencia. Los elementos más recalcitrantes de la derecha se impusieron hoy en la agenda de este partido, que desde la toma de posesión del presidente Obama declararon que su principal objetivo sería hacer del mandatario un presidente de un solo término, introduciendo enmiendas tóxicas en la votación de hoy para desmantelar no sólo la última acción ejecutiva sobre inmigración presentada por Obama, sino también una iniciativa similar que arrancó a partir de 2012 (DACA), para retirar a millones de inmigrantes indocumentados el derecho a solicitar permisos de trabajo y buscar alivio temporal de la deportación. La ley de salud también estaría en su mira.
Muchos esperaban el debate sobre la ley de gastos para volver a encender la lucha contra las más recientes acciones de Obama. No obstante, en medio del furor republicano destaca la voz del senador, Lindsay Graham, quien advirtió a sus correligionarios que no ligaran el financiamiento de DHS con el esfuerzo de derogar las acciones ejecutivas y las leyes que ha pasado Obama.
El senador por Carolina del Norte envió este mensaje a través de CNN: «A mis colegas republicanos, estamos jugando con fuego aquí. Necesitamos un presupuesto de seguridad interna robusto ahora».
El veterano legislador introdujo esta preocupación según la fuente, como parte de un esfuerzo más amplio para restaurar los fondos del Pentágono, así como de varias agencias que enumeró por su nombre: la Agencia de Seguridad Nacional, la Agencia Central de Inteligencia y el Buró Federal de Investigaciones.
«Todos los ojos y oídos de los servicios de inteligencia están empezando a ser sordos y ciegos a causa del secuestro» del presupuesto, dijo Graham.
Sus comentarios comenzaron a perfilarse desde el primer día en que Obama amenazara desde la Casa Blanca con vetar una medida de los republicanos dirigida a socavar la revisión del ejecutivo sobre las normas de inmigración. Como se sabe, los últimos actos terroristas en Paris, Francia, han elevado las preocupaciones de la seguridad nacional, algo a lo que Graham se ha referido, pues cortar el financiamiento de DHS, que termina a finales de febrero, limita las acciones de la inteligencia y pone obviamente en riesgo la seguridad nacional, cuando además hay rumores de supuestos nuevos ataques terroristas contra este país.
Y como el secretario de prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest ha dicho repetidamente a la prensa, el Partido Republicano no debe «ensuciar la legislación… Hemos hecho claro que el Presidente se opondría a cualquier esfuerzo legislativo para socavar las acciones ejecutivas que tomó para añadir una mayor responsabilidad a nuestro sistema de inmigración”.
Por eso -tal vez- es que a Graham le preocupen las enmiendas que buscan bloquear la capacidad de los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, que ejecutaría esta agencia, como también se dijo ayer en Línea Abierta, pues las cuotas que recauda la agencia por el servicio que presta a los solicitantes cubrían los gastos relacionados con los nuevos permisos de trabajo.
Otra enmienda que buscan retrotraer en 2012 los republicanos es la orden ejecutiva del presidente de que aplaza la deportación de los jóvenes amparados por DACA, el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia. El plan republicano de la Cámara incluiría una votación por separado sobre una medida que hace que sea una alta prioridad para las agencias de aplicación de la ley deportar criminales, específicamente aquellos que se clasifican como delincuentes sexuales. Y que cambiaría algunas orientaciones que fueron emitidas en 2011 por el ex jefe del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Otra polémica enmienda, impulsada con vehemencia por la representante republicana de Tennessee, Marsha Blackburn, ataca el programa DACA, evitando a sus afiliados o ‘Soñadores’ la posibilidad de renovar sus solicitudes, cuando por primera vez han sido capaces de obtener puestos de trabajo, pagar sus impuestos y buscar licencias de conducir, reporta la cadena NBC. Lo más importante, dice esta fuente, es que esto dejaría de nuevo a cientos de miles de adolescentes inmigrantes, o la generación del milenio, ante la amenaza de la deportación.
No obstante, en la sesión legislativa un número algo significativo de republicanos -26 en total- disintió de la línea dura de ese partido sobre la enmienda de Blackburn, y afortunadamente esta vez ningún demócrata votó a favor. La enmienda sólo se aprobó por escasa mayoría, 218-206; esto es una señal de que un número creciente de republicanos, muchos en distritos con alta población latina, se espera tomen una postura más moderada sobre las medidas que atacan a los Soñadores, sostiene la fuente.
Por su parte grupos defensores de los inmigrantes se unieron a los representantes demócratas en el Capitolio hoy para condenar las acciones tomadas contra las familias inmigrantes. Durante una conferencia de prensa Cristina Jiménez, directora general del grupo Unidos Soñamos (United We Dream), emitió una advertencia a los republicanos, acerca de que grupos como el suyo no olvidarán los votos que socaban los programas que benefician a la comunidad latina, y que las medidas adoptadas hoy podrían impactar al Partido Republicano antes de las elecciones 2016.
«Los votos que los republicanos están tomando para atacar acciones ejecutivas del Presidente, para desmantelar los programas DACA y DAPA son realmente un voto en contra de mis padres, contra mí, contra millones de personas que están ansiosos de conseguir el alivio de la deportación», dijo Jiménez.
Y la abogada Rosalba Piña, co-conductora de la edición de Migración, de Línea Abierta, recordó ayer en este programa que dudaba que este Congreso realmente derogue la acción ejecutiva del Presidente, pues el país se conduce en base a una división de poderes, en la que la abogada dijo creer: “Esto es por acción ejecutiva, no por acción legislativa. El Presidente actuó con todo su poder y toda su autoridad como Presidente de Estados Unidos y yo creo que va a ser difícil… El Congreso pretende controlar por medio de la aprobación de los presupuestos, pero acuérdense que gran parte de los programas de Inmigración se logran por las tarifas que pagan los solicitantes”.
Rosalba Piña dijo estar optimista al respecto, pero recordó a la audiencia de Línea Abierta que “los que son elegibles para DACA ahora deben hacerlo… en los próximos 5 meses deben prepararse y hacerlo… inclusive, las nuevas renovaciones son por 3 años, en vez de 2. Entonces es algo que deben estar siempre encima…, y no esperar a que suceda algo negativo”.
Por su parte el director de Noticias de Radio Bilingüe y conductor también de Línea Abierta, Samuel Orozco recordó que los números son importantes: “Dan un poco más de seguridad; sería más fácil deshacerse de un programa que sólo beneficia a miles, a un programa que ya tiene inscritos en sus nóminas a millones de gente, es un poder demográfico muy respetable”.
Rosalba Piña también recomendó a quienes están en posibilidad de naturalizarse como estadunidenses que lo hagan, para que se inscriban en el padrón electoral y voten. Y que la elección presidencial de 2016 puede ser influida por su voto para que no venga un Presidente republicano y de un plumazo borre la acción ejecutiva de Obama, como podría suceder si los inmigrantes no salen a votar■