Marco Vinicio González
La Cámara de representantes pasó el sábado con 220 a 207 votos la Ley de Reducción de la Inflación 2022, y con esto el Congreso aprobó la legislación en su conjunto, que expande temporalmente el Medicare y permite por primera vez a esta agencia negociar directamente con las grandes farmacéuticas para reducir el costo de las medicinas.
Hará una sustantiva inversión federal para los subsidios a la cobertura médica a través del mercado de seguros de la Ley del Cuidado de Salud Asequible u Obamacare.
También invertirá 370 mil millones de dólares en la lucha contra el cambio climático, a fin de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40 por ciento respecto a los niveles de 2005, para finales de esta década. Y para frenar el calentamiento global y transitar hacia la energía renovable o verde, lo que traería miles de trabajos formales.
Línea Abierta abordó hoy este tema de la Ley de Reducción de la Inflación que el presidente Biden firmará el martes, dirigido a «algunos programas que ayudarán a familias de bajos ingresos y a las comunidades desfavorecidas a adaptarse al aumento de las temperaturas. ¿Cómo? Pues “aumentando la eficiencia energética de sus hogares, automóviles y comunidades, centrándose en aquellas provisiones que son menos reportadas”.
La nueva ley también contempla millones de dólares en fondos de resiliencia climática para gobiernos tribales y 4 mil millones para abordar las sequías en los estados de la costa oeste, al tiempo que introduce sanciones a las empresas de combustibles fósiles con emisiones excesivas de metano.
E incluye miles de millones de dólares para crear un programa federal de licencia pagada, que brinde apoyo a la mayoría de las familias con niños y expanda la vivienda, el cuidado en el hogar y la educación pública.
Esta legislación se financiaría aumentando un nuevo impuesto a la recompra de acciones de las empresas, y un impuesto mínimo corporativo del 15 por ciento para las empresas con ganancias de mil millones de dólares en adelante. Además, la ley reduciría el déficit de la nación hasta en 300 mil millones de dólares durante una década.
A dicha ley se suma la aprobación reciente del proyecto de ley de política industrial, de 280 mil millones de dólares para la fabricación de chips en Estados Unidos, que brinda al país mejores condiciones para competir con China; y una ley que amplía los beneficios médicos para veteranos expuestos a incendios de basura que ardieron en las bases militares.
Janet L. Yellen, secretaria del Tesoro, instruyó a la agencia esta semana, dice The New York Times, para garantizar que no haya un aumento en las tasas de auditoría para pequeñas empresas o familias que ganan menos de 400 mil dólares.
Algunos progresistas inconformes señalaron que muchas de las prioridades se habían dejado de lado, como las referentes a la reforma migratoria, pero reconocieron que sin su apoyo el paquete se habría reducido aún más y que ahora “podrá usarse como una promesa de lo que una mayoría demócrata más grande podría lograr en Washington”■