Jóvenes estudiantes realizan un ‘Sentón’ frente a la Casa Blanca en protesta y por una reforma contra la venta de rifles de asalto y por regulaciones a la venta de armas.
Al cumplirse un mes de la masacre en Parkland, Florida, decenas de miles de estudiantes recordaron a los asesinados abandonando las clases en ciudades por todo el país y saliendo a las calles en demanda de reformas urgentes para el control de armas y seguridad en sus escuelas. En la capital del país, manifestantes llegaron hasta las puertas de la Casa Blanca y del Capitolio donde criticaron a los políticos que reciben dinero de la Asociación Nacional del Rifle; y pidieron acción inmediata por una reforma que prohíba la venta indiscriminada de armas de asalto. Desde Washington, José López Zamorano tiene el reporte.
Uno de los slogans de campaña de este febril movimiento nacional de estudiantes que se hizo presente en Washington, DC, para manifestar su determinación de cambio.
De espaldas a la Casa Blanca y sentados en el piso de la avenida Pensilvania, medio millar de estudiantes de 28 escuelas del área metropolitana de Washington guardan 17 minutos de silencio. Uno por cada estudiante y maestro que perdió la vida en la preparatoria, Marjory Stoneman Douglas, en Parkland, Florida.
Se escuchan consignas y tráfico vehicular…
Después del simbólico recordatorio y sin importar las bajas temperaturas, los energizados jóvenes, en su abrumadora mayoría blancos, marchan, o mejor dicho corren las 16 calles que separan la Casa Blanca del Capitolio.
Cuando pasan frente al Hotel Internacional Trump, arrecian sus consignas contra la Asociación Nacional del Rifle (NRA).
Se escuchan canticos contra NRA…
La marcha estudiantil llega al jardín oeste del Congreso. Poco después una decena de políticos demócratas encabezados por la líder Nancy Pelosi y el senador Charles Schumer llegan a hablar con los estudiantes que los reciben con su urgente demanda de cambio.
“We want change, we want change”
Conciliatoria, Nancy Pelosi les agradece su presencia:
“Gracias por traer su sentido de urgencia a las escalinatas del Capitolio”
Poco después el senador Bernie Sanders les enfatiza que apoya su demanda en favor del control de armas.
Con el Capitolio como telón de fondo, estudiantes dirigen agrias críticas a la clase política por su inacción para mantenerlos a salvo.
“La gente está cansada de la violencia de las armas, es hora que ustedes y nosotros confrontemos a la NRA”
Los jóvenes no pudieron estar más de acuerdo.
“Tú nunca sabes si vas a estar bien, si vas a regresar de la escuela, si vas a llegar a la casa, si vas a vivir ese día”, dijo Sanders.
Stefani, de 15 años, de la preparatoria John F. Kennedy fue una de las pocas estudiantes latinas que dejó las clases; su amiga Cindy de 16 años, le demanda esto al presidente Trump.
“Mejores leyes. Que ya pare con el NRA. Porque la única razón por la que tienen estas leyes es porque pagan millones de dólares”
Una de las pocas madres que acompañaron a sus hijos es Alexis de la Rosa. Junto a su hijo Leonardo, de 17 años, señala:
“Por qué ellos van hacer los líderes futuros de nuestro país y también van a votar, ellos van a cambiar”
Fente al Capitolio, los estudiantes fustigan severamente la inacción de la clase política en un mejor control de las armas.
Los jóvenes demandan restablecer la prohibición de las armas de asalto. La revisión universal de records criminales, incluidas para las ventas en mercados y elevar la edad de 18 a 21 años para la compra de armas. Pero además repudian la militarización de las escuelas.
Matt Post es uno de sus líderes:
“No nos vamos a sentar en clases con maestros armados. No vamos a aceptar nada menos que una reforma total del control de armas y si es necesario vamos a avergonzar a nuestros líderes políticos para que nos protejan”
Los políticos republicanos brillaron por su ausencia durante en este inusual masivo acto de desobediencia civil estudiantil. Más de 3 mil escuelas del país en una docena de estados se sumaron a la protesta que aseguran es sólo un adelanto de la movilización nacional que, encabezada por los sobrevivientes de Parkland, descenderá sobre Washington el sábado 24 de marzo.
