De la redacción
Se espera que en las próximas horas el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell someta al pleno la votación de un histórico paquete de rescate económico, de más de 2 millones de millones -trillones en EE. UU- de dólares en gastos y exenciones de impuestos para impulsar la economía de Estados Unidos, a fin de financiar un esfuerzo nacional para intentar detener el COVID-19.
Los legisladores y el equipo del presidente Trump, encabezado por el secretario del Tesoro Steven Mnuchin lograron acordar mayores protecciones para los trabajadores y la supervisión de un nuevo fondo de 500 mil millones de dólares para rescatar a las empresas en dificultades. Hasta la madrugada de hoy miércoles esperaban tener un texto final del proyecto de ley en las próximas horas, aunque todavía tendría que pasar por la Cámara de Representantes antes de llegar al escritorio del presidente Trump.
Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes indicó previamente que movería con rapidez dicho proyecto cuando llegue a sus manos, pero falta conocer los términos específicos del rescate y los términos del préstamo para las empresas.
No obstante, el plan incluye alrededor de 500 mil millones de dólares para respaldar préstamos y asistencia a compañías; 50 mil millones para préstamos a aerolíneas estadunidenses y para a gobiernos estatales y locales; poco más de 350 mil millones para las pequeñas empresas. Y 150 mil millones para hospitales y otros proveedores de atención médica, para equipos de protección del personal en hospitales y suministros médicos.
Se espera que la legislación se promulgue en unos días, para que las empresas no se vean obligadas a cerrar sus puertas y despedir a sus trabajadores, y para poder ayudar a las familias de éstos y a los hospitales estadunidenses. Hoy Estados Unidos se halla entre los cuatro países más golpeados por la pandemia en el mundo junto, con China, Italia y España. La Organización Mundial de la Salud dijo que Estados Unidos tiene el potencial de convertirse en el nuevo epicentro de la pandemia mundial a medida que aumenta el número de infecciones conocidas.
Algunos rasgos del proyecto de ley
El paquete incluye medidas destinadas a alentar a las empresas a mantener a los empleados en sus nóminas, incluso si sus negocios se han cerrado temporalmente, y aumenta la ayuda a los trabajadores que de todos modos son despedidos o que han reducido sus horas y salarios.
Proporciona pagos directos o un seguro de desempleo de mil 200 dólares por mes, que se extendería por cuatro meses para cada estadunidense adulto de bajos y medianos ingresos, y 500 dólares para cada niño. Los pagos serían de 600 dólares por semana, y los criterios de elegibilidad se ampliarían para cubrir a más trabajadores. Además, incluye apoyo directo para compañías grandes y pequeñas que han perdido a todos o a la mayoría de sus clientes en las últimas semanas.
Los demócratas exigieron -y ganaron- una serie de restricciones a las corporaciones que se beneficiarían de préstamos o inversiones del Departamento del Tesoro, así como un mecanismo para supervisar quién recibe el dinero.
Después de lanzar insultos a los demócratas el lunes por la noche por sus demandas en las etapas finales de las negociaciones, Trump pidió a los legisladores que aprueben el acuerdo al final del día.
Cualquier compañía que reciba un préstamo del gobierno estaría sujeta a una prohibición de recompra de acciones durante el plazo del préstamo más un año adicional. También tendrían que limitar las bonificaciones ejecutivas y tomar medidas para proteger a los trabajadores. El Departamento del Tesoro tendría que revelar los términos de los préstamos u otras ayudas a las empresas y un nuevo inspector general del Tesoro, y un panel de 5 personas designado por el Congreso supervisarían el programa de préstamos,
Los demócratas ganaron un lenguaje que impediría que cualquier negocio propiedad de Trump o su familia obtenga préstamos del Tesoro. Las empresas propiedad de miembros del Congreso, jefes de departamentos ejecutivos y el vicepresidente Mike Pence también serían bloqueadas.
Con la perspectiva de que el Congreso se acercara a un acuerdo el martes, el Dow Jones Industrial Average aumentó más del 11 por ciento, en su mayor avance desde 1933; y el S&P 500 se recuperó con la mayor ganancia en un día, desde octubre de 2008, después de comenzar la semana con una derrota. Los mercados de Asia redujeron las pérdidas tempranas después de saberse la noticia del acuerdo.
Los demócratas también rechazaron los 3 mil millones de dólares buscados por la administración Trump para comprar petróleo para la Reserva Estratégica de crudo.
El paquete probablemente duplicará con creces el déficit presupuestario de Estados Unidos, que ya estaba programado para llegar a un millón de millones de dólares este año, antes del brote de coronavirus. También puede no ser la última infusión del gasto público en respuesta a la propagación del virus.
Un plan inicial de 8 mil millones aprobado por el Congreso el 5 de marzo financia las necesidades de atención médica de emergencia derivadas del coronavirus, y un segundo plan promulgado la semana pasada proporcionará a muchos estadunidenses licencia por enfermedad pagada, asistencia alimentaria y pruebas gratuitas de coronavirus. También enviará decenas de miles de millones en ayuda fresca a los estados.
Los demócratas dijeron que la medida permitiría a los trabajadores mantener sus salarios completos si se ven obligados a dejar el trabajo como resultado de la pandemia.
Mientras tanto, los legisladores también acordaron proporcionar mil 200 dólares en pagos directos que se aplicarían por igual a los trabajadores con ingresos de hasta 75 mil dólares por año antes de retirarse y terminar por completo para aquellos que ganan más de 99 mil.
Tanto Pelosi como Schumer dijeron que habían asegurado 130 mil millones de dólares para hospitales, 55 mil millones más de lo acordado originalmente, así como 150 mil millones para gobiernos estatales y locales.
Las pequeñas empresas que se comprometen a mantener a sus trabajadores también recibirían asistencia de flujo de efectivo estructurada como préstamos con garantía federal. Si el empleador continuara pagando a sus trabajadores por la duración de la crisis, esos préstamos serían perdonados.
Los legisladores en ambas cámaras también han reconocido que es probable que se necesiten otras medidas legislativas en los próximos meses para contrarrestar las consecuencias de la pandemia■