La Oficina del Censo de Estados Unidos ha lanzado su primera gran operación de campo puerta por puerta. A partir de ahora y hasta octubre los encuestadores recorrerán los vecindarios de todo el país en busca de direcciones que no hayan podido haber sido verificadas con el software o la tecnología satelital con que se visualiza desde el espacio la composición física de los vecindarios de las ciudades. Sin embargo, esta tecnología tiene sus limitaciones, que el personal de la Oficina del Censo completa yendo a tocar casa por casa para verificar o actualizar los datos del censo poblacional anterior. La legendaria líder de los trabajadores del campo, Dolores Huerta vierte aquí algunas ideas sobre la importancia de este conteo poblacional.
Hoy echamos un vistazo al proceso de conteo del Censo poblacional 2020, que acaba de echarse a andar a nivel nacional. Para analizar el significado que tiene este conteo, la líder histórica de los trabajadores agrícolas, Dolores Huerta sostuvo un diálogo público el miércoles en la ciudad de Fresno, California, con el profesor Manuel Pastor.
Reproducimos aquí en Línea Abierta parte de dicho diálogo público con Dolores Huerta, cofundadora de la Unión de Campesinos (UFW) junto con César Chávez, y quien ha dedicado su vida a la defensa de los derechos civiles y humanos de los campesinos, las mujeres, los inmigrantes y otras minorías.
La selección, transcripción y traducción de las declaraciones de Huerta fueron hechas y lanzadas al aire por Samuel Orozco en Línea Abierta. Vale aclarar que el Valle Central de California es una zona donde contar a sus habitantes ha sido una labor históricamente difícil, dice Orozco. Pero el antídoto ante tal desafío lo tiene en sus manos la ciudadanía, señala la legendaria luchadora. Lo que hay que hacer, dice, es armar verdaderos ejércitos de voluntarios que peinen literalmente los vecindarios en riesgo de no ser contados, o de no ser contados a cabalidad.
Escuche:
“En 2010, el último censo, en la Fundación Dolores Huerta pudimos conseguir unos 200 voluntarios. Tocamos 3 mil puertas en un día. Y luego volvimos para asegurarnos de que la gente hiciera el censo. Y creo que ese trabajo fue muy crucial para hacer que obtuviéramos un escaño adicional en el Senado estatal; un escaño adicional en el Congreso, para el valle”, dice Dolores Huerta.
“En este momento, sabemos que los desafíos son enormes. De hecho, nuestros organizadores nos informaron que como parte de la organización de reuniones en las casas, cuando llaman a la gente y le dicen: ‘Queremos hablar con usted sobre el censo’, la gente cuelga. Cuelgan el teléfono. Así que, ahora es aún más difícil de lo que creemos que será. Y creo que la única palabra que tenemos que usar una y otra vez, es voluntarios. Hablamos de organizar, pero eso es bastante general. Cuando dices, ‘organizar’, puedes estar hablando de organizar tu armario, o tu cocina… Pero aquí tenemos que hablar sobre la organización de voluntarios, y del plan que tenemos.
En este segmento “Dolores pasa a poner el tema del censo en perspectiva y lo asocia con el siguiente paso, que es el de que una vez teniendo los números, ¿cómo hacer para que esos números nos ayuden a conseguir la representación política que por lo tanto merecemos?”, apunta Orozco.
Escuche:
Dolores Huerta insiste:
“Hace un momento, aquí en la galería de abajo miré un video de César Chávez hablando con un gran grupo de trabajadores agrícolas que se declararon en huelga, cuando las huelgas de los trabajadores del campo. ¿Y te imaginas lo que la gente hizo para perder el miedo a la huelga? Y ese es el tipo de sentimiento que tenemos que inculcar ahora en las personas. Número uno, nuestros organizadores le dicen a la gente: ‘hay quienes no quieren que te cuenten’. No quieren que los recursos lleguen a su comunidad, esos 480 mil millones de dólares de los que estamos hablando, que el gobierno entrega cada año. Hay gente que no anda allí por velar por los intereses de tu comunidad. Nada más compara tu comunidad, del Este de Bakersfield, con la del lado oeste. ¿Quién tiene el dinero?»
Hay quienes tienen las buenas escuelas y hay quienes no las tienen, continúa Huerta. «¿Por qué? Porque las personas no se hacen contar. Así que una cosa de la que hablamos es por qué es importante que te cuenten individualmente. Pero luego, una vez contados, ¿cómo se asignarán los recursos, quién va a decidir su destino? Pues sabes qué, eso también depende de nosotros; porque si no somos contados, no vamos a poder elegir a gente que se parezca a nosotros, o que tenga valores como los nuestros. Así que estamos hablando de hacer que se rindan cuentas sobre los recursos y hacer que se rindan cuentas sobre la representación”.
“Hay un prejuicio implícito en el Distrito Escolar de las escuelas preparatorias de Kern”, dice Dolores Huerta refiriéndose a la desproporción entre la demografía de los latinos y los maestros latinos que les enseñan en el sistema escolar. Más del 80 por ciento de los maestros en esas escuelas son angloamericanos, dice, que ni siquiera son de California, sino de Texas.
Dolores Huerta, quien todavía se haya muy activa a sus 89 años de edad, sostiene que para cambiar esta situación, en una zona como el Valle Central, llena de prejuicios contra los inmigrantes, hay que impulsar un cambio de abajo hacia arriba; y tomar el poder de las juntas escolares, de las juntas locales.
“Esta vez no vamos a tener suficientes encuestadores para el censo, y la gente no va a saber cómo contarse digitalmente. Por lo tanto, tenemos que tener voluntarios que puedan ir a la gente y decirle: ‘Te ayudaré y tendremos la biblioteca local aquí, y si no quieres que vengamos a tu casa, no hay problema, caminemos a la biblioteca local. Y te ayudaré, ya sabes, a completar tu censo’. Así que creo que si seguimos usando la palabra voluntarios, vamos a necesitar un ejército, vamos a necesitar un enorme ejército de gente para asegurarnos de que nos cuenten».
Agrega: «No podemos depender de lo que nos digan las personas: ‘Oh, recibí el mensaje, lo voy a hacer’. Porque la verdad es que no lo van a hacer. Literalmente, tenemos que ir y llevar a las personas de la mano. Es casi como lo que tenemos que hacer para sacar el voto. Pero aún más intenso que eso. Ya ven que incluso con tantas campañas por sacar el voto que hacemos, de tocar puerta a puerta, etcétera, mucha gente todavía no vota. Pero si convences a alguien en tu vecindario, podemos organizar tantas actividades de barrio como sea posible para hacer que tu vecino se sienta culpable, si no se hace contar; o sea, si no llena la forma del censo”.
En su diálogo público con el profesor Manuel Pastor en Fresno, Dolores Huerta afirma por último que todos los maestros tienen que hablar con los niños del vecindario; por si no han podido hablar con sus padres. Que en todas las congregaciones religiosas hablen del censo con ellos, en cada parroquia, en cada circunscripción. “Decirles: ‘porque si no te cuentas, pues vamos a perder ese dinero para nuestra comunidad’. Así que creo que tenemos que saturar a nuestras comunidades con este mensaje»■