La Suprema Corte deJusticia escuchó esta semana los argumentos a favor y en contra de dos leyesrestrictivas para los matrimonios entre personas del mismo sexo: la Proposición8 de California, que pretende prohibir el matrimonio gay en el estado, y la Leyde Defensa del Matrimonio, que niega beneficios federales y exenciones fiscalesa las parejas del mismo sexo, aunque estén legalmente casadas. El máximotribunal tiene que decidir si estas leyes violan o no la Constitución del País.El desenlace, esperado en junio, podría afectar a miles de parejas del mismosexo en Estados Unidos, y sus familias. José López Zamorano tiene más detallesdesde la ciudad de Washington.
En una sala de audiencias abarrotada por abogados, activistas, parejas gay, periodistas y curiosos, el abogado Charles Cooper defendió ala Proposición 8 de California argumentando que la misión central delmatrimonio es la procreación, lo cual es imposible entre homosexuales. Suargumento fue derrumbado por la magistrada Elena Kagan:
“Y si un estado dijera, como creemos que el enfoquedel matrimonio debe ser la procreación, ya no vamos a dar licencias dematrimonio a parejas en las que ambas personas tienen más de 55 años? Eso seríaconstitucional?”
“No su Señoría”, aceptó Cooper, el abogado de la ley antihomosexual.
El magistrado AnthonyKennedy aludió al perjuicio legal que sufrirían los hijos de matrimonioshomosexuales si se mantiene la Proposición 8.
“Hay 40 mil niños en California que viven con padresdel mismo sexo y quieren el pleno reconocimiento y estatus completo para suspadres. Es importante su voz en este caso, ¿no cree?”, inquirió Kennedy.
Encabezados por el abogadoTed Olson, los opositores de la Proposición 8 argumentaron que no bastareconocer los derechos de las uniones libres, sino que es necesaria que sedefinan como matrimonio, como lo han hecho nueve estados y el Distrito deColumbia.
“Es cómo decir que uno puede votar, viajar, pero no eres un ciudadano.Hay ciertas etiquetas en el país que son muy, muy importantes”, advirtió Olson.
Afuera de la corte cientosde manifestantes coreaban consignas a favor y en contra de los derechos de loshomosexuales, y del reconocimiento de los matrimonios del mismo sexo.
Gritos y aplausos…
“Buenos días a todos ustedes”
Se oyó a Janet Murguía, lapresidenta del Consejo Nacional de la Raza (NCLR):
“Familia es Familia. Estamos aquí en apoyo a lasfamilias, a la familia lesbiana,gay, bisexual y tramsgénero, o LBGT en nuestra comunidad, y urgimos a los magistradosde la Suprema Corte de Justicia a hacer lo correcto”
Un día después, el máximotribunal estadunidense escuchó los argumentos a favor y en contra de la Ley deDefensa del Matrimonio, o DOMA, que sólo reconoce a nivel federal el matrimonioentre un hombre y una mujer, y por lo tanto, niega los beneficios federales ylas exenciones fiscales a los matrimonios del mismo sexo.
Edith Windsor presentó lademanda contra DOMA, luego que tuvo que pagar 360 mil dólares de impuestos porla herencia de su esposa Thea Spyer.
“Creo que nos fue bien…, muy hermoso. Creo que losmagistrados fueron gentiles, fueron directos, hicieron las preguntas correctas.No sentí ninguna hostilidad o inferioridad”, declaró Windsor.
En el caso de la SupremaCorte de Justicia, pocos se atreven a hacer predicciones definitivas. Se esperauna decisión final en el mes de junio.
Para laEdición Semanaria del Noticiero Latino, José López Zamorano
Foto: LaSuprema Corte de Justicia en Washington, DCby dovetaildw vía Flickr