De esta suerte, los candidatos demócratas evitan hablar de la seguridad fronteriza en los términos de los republicanos, mientras los aliados de base del partido luchan por dinero y contra el agotamiento de la desinformación.

El fallo del juez Liburdi dictamina que “los miembros de Clean Elections USA, su líder y cualquier persona que trabaje con ellos también tienen prohibido filmar o seguir a cualquier persona dentro de los 75 pies de una urna electoral o a la entrada de un edificio que alberga una urna”.

Pero según el Laboratorio de Derechos de Voto / Voting Rights Lab, “los votantes se han visto intimidados por los ‘investigadores’ de la nueva oficina”, que suplantaron a anteriores funcionarios no partidistas.

El Partido Republicano sataniza a los votantes inmigrantes que está tratando de atraer, sobre todo a los desencantados con el Partido Demócrata porque sienten que no se han atendido sus prioridades. Lamentablemente lo hacen mediante desinformación e instigando división, ingredientes básicos para fomentar violencia.

Hasta hoy 20 millones de electores solicitaron ya su boleta para votar por anticipado en California: casi la mitad (47 por ciento) fueron votantes registrados como Demócratas, y casi una cuarta parte (24%) Republicanos; poco menos de un tercio (29%) fueron Otros.