Gildardo y Vanessa Rodríguez con sus cuatro hijos. De izquierda a derecha, Danna (14 años), Aixa (8) Gil (6) y Daniel (12), en Houston, Texas.
Se calcula que cerca de 3 millones de texanos están emparentados con al menos un familiar que no tiene documentos migratorios, o lo que se conoce como familia mixta. Dichas familias fueron excluidas también en el cuarto paquete de ayuda federal aprobado esta semana. Eso quiere decir que millones de ciudadanos no recibirán ayuda de emergencia otra vez por tener a un indocumentado como jefe de familia. Mariana Pineda conversó con una de estas familias y nos reporta desde Houston, Texas.
Gildardo Rodríguez, de 33 años de edad, es un electricista que ganaba bien pero al paralizarse la economía por el coronavirus sus ingresos se redujeron en un 75 por ciento.
“No estamos trabajando como antes. Sí redujeron los horarios bastante”
Los 4 hijos de los Rodríguez haciendo la tarea durante la crisis de coronavirus.
Rodríguez es ciudadano, tiene 7 hijos, 4 con su esposa actual, Vanessa Medina, una mexicana de 32 años. Llevan 10 años declarando los impuestos juntos, ella usa el número ITIN, y desde hace cinco años iniciaron los trámites para ajustar su estatus migratorio. Ante la drástica reducción del sueldo con muchas dificultades siguen pagado la renta y demás gastos, ya que Vanessa renunció a un micro negocio.
“Acababa de abrir una ‘trailita’ de snacks, pero tuve que traspasarla, porque desde que dijeron que iban a estar cerrados los restaurantes la verdad no me quise arriesgar…”
Al enterarse de la ayuda del gobierno federal se alegraron. Sin embargo, cuando supieron que Ley CARES excluía a los indocumentados e incluso a familias mixtas como ellos, se sintieron muy frustrados dice Rodríguez.
“Es un poco injusto, porque pagamos los taxes incluso, así que no sé qué tiene que ver la diferencia de la familia mixta”
Hasta hoy la familia Rodríguez con muchas dificultades puede cubrir sus gastos, pero no sabe por cuánto tiempo más.
“Hasta la fecha no hemos dejado de pagar renta, ni los ‘biles’, con miedo de que nos vayan a querer sacar”
Emily Timm, Co Directora Ejecutiva del Proyecto de Defensa Laboral en Texas.
La historia de Gildardo no es ajena para Emily Timm, Co Directora Ejecutiva del Proyecto de Defensa Laboral en Texas, organización que aboga por legislación en favor de los trabajadores inmigrantes de la construcción. Pero ante esta crisis establecieron becas de emergencia para los excluidos de la ayuda federal y que además no pueden solicitar seguro de desempleo.
“Para ayudarles con la renta, con pagos pendientes y ayudarles con necesidades básicas”, dijo Timm.
Cuando anunciaron la beca, la respuesta fue abrumadora dice Timm
“Recibimos más de 4 mil solicitudes y estamos entregando becas como a 180 familias. Entonces, la necesidad es altísima”
Y es que en Texas se calcula que viven 1.7 millones de inmigrantes indocumentados, que representan el 8 por ciento de su fuerza laboral; que no recibieron ni un centavo de los más de dos mil millones de millones de dólares de la ley CARES, pero también radican aproximadamente 2.7 millones de texanos que tienen al menos un familiar indocumentado. Precisamente por ellos trató de abogar en el nuevo paquete de apoyo Joaquín Castro, legislador demócrata de San Antonio, Texas, y presidente del Caucus Hispano del Congreso.
Representante federal Joaquín Castro (D-TX), presidente del Comité Hispano del Congreso. Foto: Tweeter del congresista Joaquín Castro.
“Si tenemos a alguien que es indocumentado que se casa con un ciudadano estadunidense y tiene hijos ciudadanos estadunidenses, tampoco recibirán nada. La familia entera recibe absolutamente nada y eso también es una increíble injusticia”
Los esfuerzos para apoyarlos no prosperaron ante la cerrazón de los negociadores republicanos. Al enterarse de la noticia, Vanessa así ventilo su frustración.
“Pues yo creo que sería justo que nos ayudarán a todos, más que nada por los niños, que es un derecho que a ellos les corresponde”
Los 4 hijos de ambos, texanos de nacimiento no sólo tienen derechos pero no sueños, comparte el padre de los menores. Danna de 14 años posee gran talento para el dibujo. Daniel a sus 12 dice su mamá que se perfila para ser Chef, le encanta cocinar. Aixa con apenas 8 años anhela ser veterinaria y Gil, de 6, es el más soñador. La realidad es que están creciendo y con ellos sus gastos. La familia da gracias a Dios porque hasta ahora no se han contagiados de coronavirus. Pero de continuar el cierre económico no hay otro camino para salir adelante, concluye Gildardo Rodríguez.
“Pos a echarle ganas en el trabajo, así peligrando pero tenemos que darle de comer a los niños”
Para la Edición del Noticiero Latino, desde Houston, Texas, Foto y Guion de Mariana Pineda.
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