De la redacción
Un aspecto inquietante de la maltrecha Justicia Criminal es la mal llamada “Guerra contra las Drogas”, que es en realidad una guerra contra las minorías étnicas y raciales en Estados Unidos. Como se sabe, esta persecución policial, que data de varias décadas, ha servido para múltiples propósitos que conducen por lo general a la discriminación impulsada por el racismo y la ambición económicas y las ganacias políticas para quienes tienen el poder. Se trata muchas veces de políticas hipócritas que generan violencia y muerte en otros países por la persecución orquestada desde DC, ya que en Estados Unidos se cultiva y forma parte de los ingresos al Tío Sam que paga esta poderosa agroindustria, lo que ha influido incluso en algunos estados para su legalización, y no sólo con fines medicinales sino incluso recreativos, así como para su venta y distribución.
La espantosa disparidad étnica y racial en los arrestos y aprehensiones por posesión y consumo de mariguana, aun en lugares donde los votantes la legalizaron a través de las urnas no sólo para su posesión y consumo, sino incluso para su distribución, como en Washington, DC, conduce a su vez al multimillonario negocio de la construcción y mantenimiento de las cárceles (este el país con más presos en el mundo, con mayoría de negros, latinos y mujeres).
Y también conduce a la pérdida de derechos civiles, como el derecho a votar, aun luego de servir condenas y salir de la prisión en “libertad”. Además, el doble estigma de haber estado preso y convicto por un asunto de drogas es una pesada carga que se lleva muchas veces por el resto de la vida.
Datos provistos por la Alianza de Políticas contra las Drogas (DPA) constatan esta espantosa realidad, que habla de las “Disparidades raciales severas y crecimiento inquietante de los arrestos por mariguana a pesar de su legalización en Washington D.C.”.
Sostienen por ejemplo que mientras que las detenciones por posesión permanecen bajas, el crecimiento es alarmante en las detenciones por distribución de mariguana así como los cargos por su consumo en público.
En un comunicado de la DPA se afirma que el Departamento de Policía Metropolitana (MPD) del Distrito de Columbia recientemente dio a conocer datos que muestran que “las disparidades raciales en los arrestos por mariguana siguen siendo altas, a pesar de que la mariguana se volvió legal para los adultos en 2015”.
En 2017, dice la Policía Metropolitana, “el 86 por ciento de los arrestados eran negros, a pesar de que los residentes negros sólo son alrededor del 47% de la población del Distrito de Columbia”.
Otro dato más del MPD señala que “las detenciones por distribución de mariguana más que se cuadruplicaron (75 a 403), y de 2015 a 2017 más que se triplicaron las detenciones por consumo en público (85 a 265)” de la yerba. Así mismo, estas cifras revelan otra realidad: “Las disparidades raciales son alarmantemente altas para ambos cargos; los datos de 2017 muestran que 92% (369 de 403) de los detenidos por su distribución eran negros, y que el 75% (200 de 265) de los detenidos por el consumo público eran negros” también.
En cuanto a lo político, las estadísticas de la DPA descritas arriba señalan por ejemplo que la Iniciativa 71 fue aprobada en el Distrito de Columba por abrumadora mayoría de votantes, quienes rechazaron en las urnas la prohibición del uso, la posesión y el cultivo de mariguana por parte de adultos, “y su legado de aplicación parcial de la ley”. Esto, en gran medida “para eliminar las disparidades raciales en los arrestos por mariguana”.
Sin embargo, agrega la Alianza para la Política contra las Drogas, debido al prejuicio racial y la aplicación desigual de la ley, “cuatro años más tarde los hombres negros continúan siendo blanco abrumador de los arrestos”. Y rechaza enfáticamente esta situación, que continúa mermando a las comunidades de color: “!Esto es inaceptable! Los arrestos por mariguana no mejoran la salud ni la seguridad pública, y violan la voluntad de los votantes”.
DPA aclara que las consecuencias para la salud pública de un arresto “superan con creces las consecuencias para la salud pública del consumo de marihuana”. Sostiene por ejemplo que el Departamento de Policía de Nueva York (NYDP) anunció recientemente un cambio en su política sobre el uso público de mariguana, “específicamente debido al problema de las disparidades raciales en la aplicación de la ley”.
DPA afirma que incluso la exJefa del MPD, Cathy Lanier declaró hace algunos años que “Lo único que hacen los arrestos es que la gente nos odie».
Es absurdo, concluye el comunicado de DPA, “que a pesar de la legalización en el Distrito de Columbia el MPD continúe haciendo tales arrestos”■
Estadísticas y enlaces relacionados con las políticas del gobierno federal “contra las drogas” sugeridos por DPA (inglés):
- http://www.drugpolicy.org/press-release/2018/08/stark-racial-disparities-and-disturbing-growth-washington-dc-marijuana
- Análisis del canal de TV WUSA 9 (CBS, DC) Agosto 7, 2018
- Departamento de Policía Metropolitana: 86% de la gente arrestada por mariguana en DC es negra
- Arrestos relacionados con la mariguana se elevaron al 186% de 2015 a 2017.
- https://www.wusa9.com/article/news/investigations/police-86-of-people-arrested-for-marijuana-in-dc-are-black/65-581301045
- Nuevos datos de la Policía Metropolitana del Distrito de Columbia:
- Prohibición del Congreso para la venta de mariguana en Washington, DC., condujo a Arrestos. Polly Washburn Agosto 7, 2018
- https://www.marijuanamoment.net/congressional-ban-on-d-c-marijuana-sales-drives-arrests-new-police-data-suggests/