De la redacción
El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, republicano por Kentucky, en el centro, con el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, republicano de Wisconsin, y otros miembros del GOP en el anuncio de la aprobación del presupuesto. Foto: Chattanooga Times Free Press.
Con la mínima diferencia de votos (51 a 49) y de nochecita, el Senado de Estados Unidos aprobó el presupuesto este jueves, respaldado por los republicanos. Analistas interpretan la maniobra como un “gran paso adelante”, encaminado al largo esfuerzo del Partido Republicano (GOP) por decretar sus soñados recortes tributarios, reporta The Washington Post.
La aprobación del presupuesto permitirá al GOP utilizar una maniobra de procedimiento para aprobar la legislación fiscal a través del Senado con 50 o más votos, eliminando la necesidad de apoyo de los senadores demócratas. El polémico presupuesto para el año fiscal 2018 incluye recortes multimillonarios a los programas sociales como Medicare y Medicaid, y allana el camino hacia una reforma tributaria.
«Esta noche, completamos el primer paso para reemplazar nuestro código de impuestos roto. . . Tenemos una oportunidad única en la vida para reemplazar un código impositivo fallido que impide a los estadunidenses obtener uno que realmente funcione para ellos», dijo el líder de la mayoría del Senado, el republicano por Kentucky, Mitch McConnell. Su correligionario y también de Kentucky, Rand Paul fue el único republicano que se opuso, y voto “no” contra de la medida.
Abandonado la ortodoxia republicana, dice la fuente, la medida “abre la puerta a la expansión del déficit fiscal aumentándolo en 1.5 millones de millones de dólares (trillones en EEUU) para los próximos 10 años». Por el contrario, al acordar el recorte masivo de impuestos, los republicanos del Senado oficialmente alejaron al partido de su objetivo prometido, de garantizar que el plan fiscal no se sumaría al déficit.
«Esto ahora permite la aprobación de cortes de impuestos a gran escala (y de Reforma fiscal), que serán los más grandes en la historia de nuestro país», escribió -vía tuit, sobre decirlo-, el presidente Trump, anteriormente “frustrado con los republicanos por tantos fracasos con la reforma de salud”.
Y aunque los demócratas propusieron enmiendas a la propuesta de los republicanos, estas no tuvieron el éxito buscado. Por ejemplo una, de la senadora Heidi Heitkamp (demócrata por Dakota del Norte) propuso evitar aumentos de impuestos a las personas que ganan menos de 250 mil dólares al año. La enmienda propuesta también habría requerido que el Senado aprobara un proyecto de ley de reforma tributaria con 60 votos en lugar de una mayoría simple. El presidente del Comité de Presupuestos del Senado, Mike Enzi (R-Wyo.), calificó a este lenguaje como una «píldora venenosa» y la enmienda fue derrotada 51-47.
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