Rubén Tapia

Noticiero Latino, Los Ángeles, CA.

Miles de trabajadores de cuidados en casa, acompañados de sus hijos, grupos comunitarios y algunos legisladores protestaron ayer en el Capitolio estatal (Sacramento) para urgir al gobernador de California, Jerry Brown, que no recorte fondos para el programa de cuidado en casa y retire el límite al tiempo extra que necesitan trabajar para cuidar a sus hijos y familiares discapacitados, según lo establece el presupuesto que está negociando con la legislatura.

El sindicalista del SEIU -United Long Term Care Workers-, Ney Montes, un vocero de los manifestantes declaró a Noticiero Latino que son “60 mil las personas que van a perder el 43 por ciento de su ingreso con este límite que propone el gobernador. En total, el número de personas impactadas son 450 mil, y cada una cuida a por lo menos una o dos personas”.

Una de las personas impactadas es Elena Sandoval, madres soltera que desde hace más de seis años cuida a una hija con autismo y a otro hijo con discapacidad severa. Antes trabajaba limpiando casas y con la ayuda del programa afectado, “In Home Suportive Services”, mantiene a su familia estable; si recortan el presupuesto tendría que regresar a trabajar en un empleo de bajo salario, y bregar con la angustia de no saber cómo pagaría el cuidado especializado que requieren sus dos hijos y además perdería su casa. “Para ellos también sería muy difícil, y sufrirían ellos y también sufriría yo si hacen esos recortes”, dijo Sandoval.

La fecha límite para resolver el tema de los ajustes presupuestales es el 15 de junio.

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